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EUROPA PRESS /
El delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Francisco Babín, ha asegurado este martes que el éxito de los programas de rehabilitación e inserción sociolaboral de las personas drogodependientes es un "ahorro" a largo plazo para la sociedad.
En el marco de la presentación del 'Manual de buenas prácticas en mediación comunitaria en el ámbito de las drogodependencias' que ha publicado el Instituto de Adicciones Madrid Salud en colaboración con varias asociaciones, Babín ha insistido en los beneficios "no solo desde el punto de vista ético sino también económico" de potenciar el éxito de estos programas.
En este sentido, ha explicado que las personas que logran rehabilitarse e incorporarse a la sociedad y al mercado laboral "pueden ejercer su derecho a ayudar en igualdad de condiciones con su trabajo a construir y engrandecer la sociedad" y que, además, dejan de necesitar la atención de los programas de reinserción sociolaboral.
Por ello, ha aplaudido y agradecido a los organismos y asociaciones que han colaborado en la redacción del nuevo manual de buenas prácticas, que recoge un análisis de las estrategias y medidas que han ayudado a la reinserción sociolaboral de un total de 2.500 personas en la Comunidad de Madrid desde 2008.
El documento, en cuya elaboración han colaborado organizaciones como la Fundación Atenea, o las organización La Koma y Ciudad Joven, pretende, en último término, "recoger la experiencia y los éxitos del trabajo conjunto" para ayudar a mejorar la calidad de vida "de los drogodependientes, de sus familias y de toda la sociedad" a través de la inserción laboral, según ha explicado el delegado del Área de Gobierno de Seguridad y Emergencias de la Comunidad de Madrid, Enrique Núñez Guijarro.
En este sentido, Núñez Guijarro ha destacado la dificultad de que las personas que han sido drogodependientes "puedan competir en igualdad de condiciones en el mercado laboral", no sólo por las "consecuencias cognitivas" que produce el consumo de estas sustancias sino también por las dificultades sociales, familiares y económicas que conlleva.
Por ello, ha destacado la necesidad de aplicar las medidas que propone el Manual y que se basan, principalmente, "en una atención integral y personalizada".
Así, entre algunas de las actividades que llevan a cabo las organizaciones y los responsables del Programa de Integración Sociolaboral (SOL), el manual reseña la atención continuada de los orientadores durante todo el proceso de reinserción, que incluye tanto talleres profesionales como talleres de habilidades sociales y laborales que permiten que los usuarios de estos programas puedan readquirir una "conducta" que les permita desarrollarse "plenamente" en un ámbito social y de trabajo "normal", según han indicado los responsables del documento.
Las organizaciones e instituciones que han participado en la elaboración del documento han insistido especialmente en la necesidad de realizar una rehabilitación "integral" que incluya tanto la conducta y la autoestima personal y la formación laboral como el trabajo de las capacidades sociales y familiares, que permitan su "plena integración" en la sociedad.
Durante la presentación del acto, ha dado su testimonio Javier, uno de los exdrogodependientes que han pasado por los programas de la organización La Koma, gracias a los que, según ha asegurado, "su vida se ha dado la vuelta".
"Nunca había podido mantener un trabajo más de un mes y medio, no aguantaba y me fallaban la conducta y los nervios. En cuanto me decían algo me largaba", explica Javier, que reconoce que ha pasado cerca de 15 años asistiendo al Centro de Atención a las Drogodependencias (CAD) de Vallecas (Madrid).
En la actualidad, gracias a la atención de los responsables de los talleres "que llegaban a dedicarle cinco horas diarias para escucharle", "consigue mantener los trabajos que le dan" y asegura que "es impresionante poder estar tranquilo" y "poder hablar y que la gente le escuche".
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