El Periódico de Aragón 24-10-2011
Los narcotraficantes holandeses se instalan cada vez más en España, no solo para disfrutar de sol y playa, sino para reemprender aquí un negocio, el cultivo masivo de marihuana, que en Holanda está sufriendo desde el 2006 una persecución cada vez más severa por parte de la justicia. Cada año, la policía holandesa desmantela en aquel país unas 6.000 plantaciones de marihuana, grandes y pequeñas, instaladas en naves industriales, invernaderos y también buhardillas y sótanos de casas unifamiliares.
Pero no es la única manera con la que se persigue en aquel país a uno de los negocios más prósperos, aunque a la vez ilegal: en Holanda se puede vender libremente marihuana o hachís en mínimas cantidades en los famosos coffeeshops, pero el cultivo de marihuana, que en Holanda es casi siempre la variedad autóctona de Nederwiet, está prohibido.
Hacienda también echa una mano. En el 2010 el fisco gravó a 80 cultivadores detenidos por la policía por un total de 4,5 millones de euros, en el concepto de impuestos no pagados sore las ganacias del lucrativo negocio. Las cooperativas de viviendas, que son las que en Holanda alquilan pisos y casas, ya tienen desde el 2006 la opción de echar a un arrendatario de una casa si se le descubre una plantación prohibida. Y los bancos tienen acceso al historial delictivo de los clientes que piden una hipoteca: si han sido condenados por cultivo de cannabis, les pueden negar la hipoteca.
ante tanta presión policial, judicial y social en un país muy pequeño y densamente poblado donde es difícil esconder durante mucho timepo grandes plantaciones de marihuana, una parte de los cultivadores han decidido emigrar a España par seguir con ese negocio. España es atractivo por varias razones: el clima para cultivar al aire libre, la disponibilidad de terrenos o naves relativamente baratos, el menor riesgo de ser descubierto en u país comn muchas zonas despobladas, un alto nivel de consumo de marihuaan, aunque una parte sevuelva a importar a Holanda, y unos castigos relativamente suaves en el caso de ser descubiertos.
